Molinos de viento de madera e invernaderos tradicionales que bordean el agua, campos de coloridos tulipanes y tiendas de artesanía que datan del siglo XVIII: el sitio patrimonial Zaanse Schans es tan pintoresco como puede ser. El pueblo alberga una colección de molinos de viento centenarios y encantadoras casas de madera, la mayoría de las cuales fueron trasladadas allí en la década de 1960 para preservar su patrimonio cultural. Sin embargo, Zaanse Schans no es un museo, hay personas reales que viven en las casas y varios molinos de viento todavía están trabajando. También hay una fábrica de zuecos, un museo de panadería y una granja tradicional donde puedes probar deliciosos quesos holandeses. www.dezaanseschans.nl Ingrese a un molino de viento tradicional y pruebe un delicioso queso. Explore el pueblo de molinos de viento que recubre el agua, aprenda cómo se hacen los zuecos, pruebe un poco de queso y entre en un molino de viento en funcionamiento. También hay algunos museos, como el Museo Zaans, donde puedes ver trajes tradicionales y utensilios del pasado.